Mi motivación:

Gracias a mis estudios, viajes y experiencias personales he tenido la oportunidad de conocer a gente de muchas partes del mundo y eso me ha ayudado a tener una mentalidad abierta. Los idiomas no solo te ayudan a crecer profesionalmente, sino también personalmente.
Dedico gran parte de mi vida a entender cómo funcionan las lenguas y poder enseñarlas es algo que me resulta muy satisfactorio. Mi interés por la lingüística se fue forjando progresivamente gracias a todas las diferentes experiencias que tuve en relación con las lenguas; sobre todo aprendiendo, traduciendo y enseñando.
Enseñar una lengua extranjera significa guiar o ayudar a los estudiantes a conseguir fluidez en ese idioma. Dedico mucho tiempo y esfuerzo a crear contextos basados en situaciones cotidianas distintas para que mis alumnos puedan utilizar el idioma en situaciones reales. Creo firmemente que un profesor de idiomas es alguien en quien los alumnos pueden confiar para resolver sus dudas y mejorar sus conocimientos lingüísticos.

Empresas para las que he trabajado:







